La conquista efectiva del boleto estudiantil demanda una lucha de conjunto: “manos a la obra”

El año pasado recorrimos un camino de intensa lucha. Al calor de los aumentos del boleto salimos a las calles a denunciarlo y a exigir un boleto estudiantil gratuito con radios abiertas, petitorios, intervenciones en los medios, juntada de firmas, jornadas artísticas y culturales, pintadas, corte de calle, denuncias públicas, asambleas estudiantiles y movilizaciones

En este cuadro, el gobierno municipal anuncia, con bombos y platillos, que han presentado un proyecto de ordenanza para establecer el boleto universal gratuito. ¿Habrá que sentarse a esperar que lo aprueben? De ninguna manera. Debemos retomar ya la más amplia movilización de la juventud para conquistarlo. Es que el proyecto viene del mismo gobierno que ha aumentado el boleto en un 100% (de 1,50 a 3 $), lo mismo ha hecho con las tasas y servicios municipales y los impuestos a los pequeños comerciantes. ¿Será que preparan un nuevo ajuste del boleto general con la pantalla de que ahora los estudiantes viajaríamos gratis? De ser así la plata para financiar el boleto estudiantil saldrá del bolsillo de nuestros padres.

La intendencia radical, que tiene a centenares de trabajadores en negro con ingresos de $ 600 al mes (igual que Fellner en la provincia)¿Se ha vuelto de pronto defensora de la justicia social?

Veamos el proyecto  y encontraremos la “pata de la sota”.

Dicen que “al boleto estudiantil lo va a financiar un impuesto al juego”. Algún desprevenido pensará que se trata de un impuesto a las ganancias de empresas que se llevan  fortunas, la verdad es que lo que se aplica es un impuesto a los que juegan. Al que compra una rifa, un bingo o una ficha de tragamonedas, le van a recargar un 6% adicional en el precio. Otra parte del financiamiento lo harán sobre los espectáculos públicos, pero no sobre los empresarios de la música, sino sobre la juventud y los trabajadores que desarrollan su tiempo libre en estas actividades.

Hay que saber que las empresas, además del boleto que pagamos, reciben subsidios del estado  con los que duplican la recaudación. En definitiva a las empresas les pagamos una parte con el boleto y la otra con subsidios  que salen de la recaudación  de  impuestos .Todo sale del bolsillo del pueblo. Así tienen la rentabilidad garantizada.

¿Por qué en lugar de inventar un nuevo impuesto que va a pagar la población, no abrimos los libros contables de las empresas y veremos las ganancias extraordinarias que acumulan?

Desde el Partido Obrero decimos que para financiar el boleto estudiantil y evitar nuevos tarifazos hay que ahorrarse el parasitismo de las empresas y organizar un servicio estatal bajo control de trabajadores y usuarios.

Por otra parte queda para la reglamentación, que después hace el intendente, si vamos a poder usar el boleto, a toda hora, todos días del año como corresponde.

Queremos un carnet estudiantil para usar todo el año y no cupos de un número limitado de boletos como se esta hablando.
Un abono obrero y popular que actualmente no existe y que beneficiara miles de usuarios.

Reclamamos que los colectivos interurbanos entren en todos los barrios.

Proponemos asambleas unitarias e interestudiantiles y docentes de todos los colegios, institutos y universidades.

Adelante!

UJS-PARTIDO OBRERO JUJUY

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